Parking en Teatro Alcázar

Es probable que a muchos os suene el renovado Teatro Alcázar como parte de la leyenda negra madrileña. Este local de representaciones teatrales se ubica en la conocida calle Alcalá de la capital, concretamente en el número 20 de la vía.

El inmueble que alberga este teatro ha sufrido numerosos incendios y accidentes a lo largo de su historia. En el año 1983, la famosa discoteca Alcalá 20, que se encontraba en los bajos del edificio sufrió uno de los incendios más devastadores del siglo XX en Madrid. Mientras se celebraba una de las clásicas fiestas en la madrugada de la Movida Madrileña, la discoteca se incendió irremediablemente, dejando 81 muertos y 24 heridos graves. Por suerte, el teatro, en el que se representaba el musical “Por la Calle de Alcalá” estaba ya completamente vacío.

Pero este no fue el único incendió que ha padecido el edificio en cuestión, ya que en el año 2013 se quemó completamente la última planta del edificio, que acoge numerosas oficinas. Por suerte, en este desastre no hubo víctimas mortales. Además de esto, en los inicios del edificio hubo otros accidentes, como el derrumbamiento del local anexo al mismo.

El edificio que acoge al Teatro Alcázar se levantó en el año 1925, el mismo en el que se inauguró el teatro. La primera representación fue la opereta “Madamme Pompadour” de Leo Fall y albergó a un total de 800 espectadores.

La historia del teatro no está ajena a complicaciones. Hasta el año 1940, su nombre real era Teatro Alkázar, pero Franco prohibió las nomenclaturas que no sonaran españolas y finalmente cambió su nombre por el actual. A principios de los años 30, el teatro también funcionaba como sala de cine.

El Teatro Alcázar de Madrid siempre ha tenido un especial vínculo con el género de la Revista española. Pese a que el teatro ha tenido que permanecer cerrado en numerosas ocasiones, debido a los múltiples accidentes que han asolado el edificio, en el año 2012 recibió el patrocinio de Cofidis, pasando a llamarse Teatro Alcázar – Cofidis.

La espectacular fachada del teatro y del edificio fue completamente restaurada en 2004. Sin duda, se trata de uno de los teatros más emblemáticos de Madrid y merece la pena ser testigo de las representaciones que en él se realizan.